✔️ VOLVIENDO A LA CORDURA


Que duro cuando lo alegre te quita la inspiración,
no creas que de tristezas siempre vive el escritor,
no creo que sea mi caso, empezó la narración,
lo que paso en este día no tiene comparación.

Las risas incontenibles bajaban de la vereda,
unos bailaban, cantaban, no se entendía la escena,
yo miraba interesado lo entretenido que era,
y los del frente invitaron a sumarme a la marea.

Marea de risas cómplices y chistes de inmadurez
esos que muestran alma y toda su desnudez,
no esperaba divertirme, tanto como ese día,
en el que todo brillaba, en el que todo valía.

Miraban por las ventanas, las viejas medio espantadas,
viendo saltando estos niños de trajes todos marcados,
volvimos a nuestros años de la locura de chicos,
en la que todos juntos éramos mucho mas que un grupo.

Se avecinaba la noche, y volvía la coherencia,
esa que no interesa, que maduros nos encierra,
de pronto nos vimos sucios, nos miramos de reojo,
nos pusimos los zapatos y nos fuimos medio tontos.

Nadie olvidara nunca, lo que sucedió ese día,
en que los hombres de traje jugaban con alegría,
en que dejaron sus puestos para ser un chico mas,
sin jerarquías, ni broncas, sin nada que separar.

José Moyano